Viajar con niños es algo que cualquier familia debe asumir, quizás los bebés son bastante fáciles para coordinar con los viajes, necesitan unas buenas condiciones generales pero no se aburren y demás. Cuando son algo más mayores... la cosa se vuelve más compleja. Es necesario que estén ocupados y, sobre todo en vuelo, cansados.
Es importante entender lo que provoca un viaje con niños... con lo que aquí os planteamos 5 consejos que quizás os puedan servir de ayuda:
No pienses que son un obstáculo
Es un gran error, se sorprendería de lo fácil que los niños se adaptan a otras culturas y realidades. Además, no podemos olvidar la experiencia vital que se llevan para toda la vida.
Establecer un espacio de tranquilidad
Los niños pequeños se cansan muy rápido, sobre todo si las cosas son aburridas para ellos. No podemos esperar un comportamiento adulto, necesitan jugar y desfogar energías. Como tanto se dice, niño cansado, niño bueno.
Conoce tus límites
Posiblemente no cuidáis a los niños en casa 24 horas los 7 días a la semana, con lo que es posible que os agobiéis en ocasiones. Quizás en algún momento necesitéis una noche sin niños, con lo que ¿por qué no contratar una niñera? Otra opción puede ser turnarte con tu pareja para tener un rato libre...
Cuida de ti mismo y tu familia
Las normas de seguridad son las mismas para todo el mundo, pero un viaje de larga duración te puede poner en tensión por si todo irá bien y nadie caerá enfermo. Aprovecha los descuentos familiares en los seguros de viaje, quizás así puedas viajar más tranquilo. Eso sí, infórmate bien del destino en este sentido antes de ir o contratar nada.
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