Sabemos que muchos estáis contando los
días que faltan para el estreno en las salas de una de las películas
más esperadas, El Hobbit. Tras finalizar la primera trilogía de El
Señor de los Anillos llega la hora de volver al mundo de fantasía y
descubrir como comenzó todo, por supuesto disfrutando de los
impresionantes paisajes de Nueva Zelanda.
Si llegamos uno de estos días vía
aérea al país de El Hobbit veremos como sus instalaciones reflejan
claramente la importancia de esta película, incluso se han lanzado
sellos de la Tierra Media y, en cierto modo, el turismo de Tolkien es
una de las mayores industrias en Nueva Zelanda.
Y si nosotros somos de esos viajeros,
la primera parada la debemos llevar a cabo en Matamata...
Matamata
Aquí es donde vive Bilbo Bolsón, el
pueblo del norte donde esta su casa, la zona “llamada” La
Comarca. Tolkien tenía toda la intención cuando la describió de
que fuera la parte más encantadora de los paisajes ingleses, y esto
es así solo que un poco, bastante, más salvaje.
Hay 44 agujeros Hobbit con diferentes
tamaños que varían para capturar y crear las ilusiones ópticas
propias para las casas y habitantes de La Comarca. Podemos dar un
paseo por la zona en la que habita Bolsón, llegar al hermoso lago
(eso sí, artificial en este caso) y entrar en el Green Pub Dragon.
Lo cierto es que el lugar en sí está
cargado de magia, algo que percibiremos tan pronto como lleguemos,
una magia que nos transportará casi inmediatamente a La Tierra
Media...
Foto: ed 37 ~~
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